VOICE y la dualidad espiritual en “Holy or Damned”

Banda: Voice

Nación: Alemania (Germany)

Género: Heavy Metal

Álbum: Holy or Damned

Año: 2024

En esta vida, no se puede ser neutral, por mucho que se intente. El raciocinio mental es inclinado según varios motivos, fueran las creencias, emociones, ideologías… Para la irrupción de la religión, ser un santo o un condenado tiene una connotación artística que se ha visto plasmada en infinidad de vías como la pintura, la escultura o la música. Resurgida de las tinieblas hace unos años, la banda Voice ha querido ser partícipe de este debate a través de su nuevo disco, «Holy or Damned», el cual firma el regreso absoluto de los germánicos y su estilo power/progressive que muchos echaban de menos gracias a esa versatilidad compositiva que rodea al quinteto. No diremos que somos fanáticos de Voice, pero sí que ha sorprendido este lanzamiento inesperado, de modo que tiene que pasar por el análisis y quedar conformes con él.

Podrá ser una voz que suba al cielo o descienda al infierno, lo que se demuestra en la apertura del álbum con «Nevermore» y esos ritmos de guitarra afilados que nos cautivan en una espiral rockera. Secundado de una sólida base estructural de batería y graves nivelados, Oliver ejerce una voz seria y templada que resulta interesante en la evocación de las líricas y cómo se engrana una situación de duelo y pérdida que la armonización completa en un solo nostálgico de belleza intrínseca. Aunque no hay mucho espacio para el bajo, la ambientación especial se convierte en una pista imprescindible de la creatividad grupal, sin obviar los coros de los estribillos. Algo más elaborada gracias a las melodías ensambladas en notas ligadas, «The Silence of Prescience» rompe los esquemas sin perder ese toque clásico que incita a la comodidad de los buenos tiempos y captar la atención en un cúmulo ilusorio de modernidad musical. Se observa una clara intención de motivar al oyente por la alta participación de los artistas junto a la voz, cuyo tono impecable se hace exquisito en la madurez laríngea. De nuevo, la composición solista asombra en la elegancia del contrapunto y los duetos propios. Dedicado a la gente que siempre recuerda las sabias palabras parentales cuando la vida se tuerce hacia el lado equivocado, el uso de acordes alternantes de «In This World» no le hace sombra al increíble trabajo percusionista de Sven, un fuera musical que nos recrudece la historia lírica en unos baquetazos nítidos y enérgicos. A su vez, el doblete guitarrero de Thommy y Rainer refuerza la teoría elemental mientras que (¡ahora sí que sí!) Sören aparece al fondo rellenando los quebrados armónicos y haciendo que el break medial brille en todo su esplendor. Los sueños marítimos y de libertad se patentan con «Dream On» y su particular estilo heavy que continúa el análisis con el protagonismo de Sven, el cual guía la genial composición en otro especial entramado musical. El deseo de aventuras enmudece ante el elevado coro del estribillo, que se convierte en fuerte indiscutible del tema y obliga a levantar las manos hacia lo desconocido, así como afrontarlo con voluntad de hierro. Si no fuera por la calidad pesada, no haría falta utilizar la acústica para calificarlo como una balada.

Ejercer el poder por derecho de nacimiento genera inseguridades que llaman a la violencia personal. Este hecho se evidencia en «Schizo Dialogues» gracias al portentoso y autoritario tono de Oliver enfrascado en una oscuridad ambiental que estalla en un ritmo cabalgante donde Sören se hace fuerte en su presencia instrumental. No cabe duda que la disposición de Voice hacia los temáticas sociales requiere de mucha experiencia, por lo cual, este corte posee mucha personalidad que haría botar al público al unísono. Es difícil resumir una vida en casi ocho minutos, pero la banda lo intenta con la elegía al envejecimiento vital con «Tears in the Dust». La doble acústica, imbuida en unos suaves graves, ofrece el ambiente adecuado para que las líricas dancen alrededor de los recuerdos y todo lo referido al oyente, incluso cuando la distorsión y crudeza se apoderan de las líneas en el break radical comandado por el solo. Escuchar esta canción es igual que ver una película (a cámara rapidísima) de toda una vida, y emular ese hecho no lo consigue cualquier banda. Internet es una espada de doble filo que corta, al usuario, independientemente de su uso. «Chatroom Whispering» hace un lavado de cara a Voice con las premisas sonoras de un groove/death para denunciar la maldad que recorre el mundo cibernético, como las lascivias descontroladas, los bulos y el odio que recorre las redes sociales. Un problema creciente que apenas nos damos cuenta de su importancia y que los germánicos reivindican con esa vuelta de tuerca creativa; no hay pérdida del estilo originario, pero sí una evolución discreta con motivo de la temática. Regalando más disfrute a la vez que se surcan los siete océanos, «Privateer» aparta el folclore y cultura social en un cúmulo musical dominado por unas progresiones alegres con una potencia que provoca un oleaje heavy de masas. Un intento de romper cabezas y oídos repleto de graves y cuyo destino es captar fans de otros géneros extremo, lo cual se logra para los amantes más clásicos y puretas.

Poner a la sociedad frente a un espejo y enseñarle cómo es en realidad tiene un nombre, el esperpento, de modo que Voice nos dedica «Let’s Go Ahead» para ver la verdad de forma sarcástica y bastante acertada. La dualidad guitarrista resulta perfecta en la combinación solista, incluyendo un plus recio de adorno centrado en algunos versos y un break de Sören que se recrea con un escueto sonido cruel. La faceta más versátil y polifónica de la banda coge a «Only Grey Remain» con pinzas y durante el recorrido musical, enseña otro punto de vista de la vida en la base de Sven y su molde baterista arraigado a la intensidad vocal de Oliver. A los lados, Thommy recarga los riffs de acordes a la vez que Rainer en una batalla cuya esencia rivaliza en la eternidad y que se hace muy amena. Por último, «Petrified Dreams» Se les nota inspirados, pero todavía queda mucho camino por recorrer para recuperar la fama del cambio de milenio. Sin embargo, este disco deja patente la vuelta de Voice y las ganas de seguir vivos en el mundo del metal/rock. Vuestro redactor y crítico Wesker le adjudica una ambigua nota de 8,5. No hay santos ni demonios, pues entre la luz y la oscuridad… ¿Alguien da más o nos quedamos en el limbo?

TrackList

1 – Nevermore

2 – The Silence Of Prescience

3 – In This World

4 – Dream On

5 – Schizo Dialogues

6 – Tears In The Dust

7 – Chatroom Whispering

8 – Privateer

9 – Let’s Go Ahead

10 – Only Grey Remain

11 – Petrified Dreams