SEBASTIAN BACH y la añoranza juvenil de “Child Within the Man”
Banda: Sebastian Bach
Nación: Estados Unidos (EEUU)
Género: Heavy Metal
Álbum: Child Within the Man
Año: 2024
Formó parte de la legendaria banda Skid Row y con sólo tres álbumes de participación en una década, ¿quién no conoce a Sebastian Bach? Alto, rubio, apuesto… Es difícil no fijarse en él, más si contamos con el vozarrón inconfundible que tiene. Su último álbum, «Give ‘em Hell», fue un éxito de ventas en el mundo occidental, pero el anonimato envolvió a Sebastian durante años hasta que, después de la pandemia, el cantante resurge de la ausencia mediante «Child Within the Man» una apuesta de carácter nostálgico que nos devuelve a la juventud que una vez fuimos. Aunque me cueste decirlo, esta reseña me gustaría dedicársela a mi primera y única expareja, Selina, pues es una gran fan de Sebastian Bach. Gracias a ella, descubrí al cantante y a Skid Row.
Podríamos estar hablando de las increíbles dotes laríngeas de Sebastian durante todo el álbum, y aunque él es el protagonista del mismo, se obviará (lo suficiente) ese aspecto con motivo de dar una visión más holística al análisis. Por ejemplo, bien se sabe que la combinación del heavy metal/hard rock del artista es notoria como su propia figura, de modo que «Everybody Bleeds» deja un gusto brutal de pesadez y belleza melódica con ese riff arpegiado sostenido por acordes de quintas y una batería lenta pero bien virtuosa, sin quitar mérito a ese solo guitarrero intenso. A Sebastian le encanta trabajar con personas de su entorno, las cuales le ayudan a componer y grabar temas; es el caso de «Freedom», un bombazo rockero al estilo old school del glam metal bajo la dirección de John 5 (Mötley Crüe) que, a pesar de su brevedad, demuestra estar en plena sintonía con los sutiles cambios vocales de Sebastian en las líricas y con un bajo sobresaliente. «(Hold On) To the Dream» se nos muestra con una final piel de power ballad que acaba transformada en un himno hacia los fans más nostálgicos del artista, ya que el sonido es totalmente puro y directo a levantar masas en directo. Algo más country y groove pero sin salir del hard rock moderno, «What Do I Got to Lose» es el feudo de los breaks vocales y el apoyo coral al estribillo. Suena tan bien que, a la vez que los graves potencian la base musical, nos dan ganas de coger el micrófono e imitar a Sebastian en la medida que se pueda.
Casi a mitad del álbum, «Hard Darkness» recrudece las ondas mecánicas para obtener un aspecto más enigmático en mayor distorsión. A través de un descenso de los tempos, Sebastian se envuelve de la ambientación para resaltar cual estrella en las tinieblas, elevado por la batería y sus tremendos redobles. ¿No os recuerda «Future of Youth», un poco, al estilo de Alice Cooper en los ritmos y el genial solo? La clave está en la colaboración guitarrista de Orianthi, la prolífica intérprete australiana. Sebastian sabe rodearse de calidad, ¡y no es para menos! El estilo heavy metal clásico se hace patente en «Vendetta», que incluso con los cambios estructurales de las líricas y el estribillo, la guitarra nos ofrece una variedad de ritmos simples capaces de mover melenas al viento junto a una armonía de relleno en la retaguardia. El último invitado del disco se presenta en «F.U.» siendo Steve Stevens (Billy Idol). Cambio punkarra, velocidad instrumental, cierta alternancia sonora con solos reconocibles… Está más que claro que la canción quedaría del gusto de Billy Idol, y si es cantada por Sebastian, ¡no se hable más!
Acabar «Child Within The Man» de forma correcta y sin altibajos no parece una tarea complicada, así que Sebastian retoma el mejor metal/rock de los noventa con «Crucify Me» y «About to Break». Un dúo de temas dedicado a quebrar la errónea idea que se tiene del artista fuera de Skid Row, en plan: “ya no vale” “está mayor” o “ha cambiado a peor”. ¡Ya quisieran muchos llegar al rango tonal del músico a su edad o hacer temazos como él! Por último, y con ganas de mostrarse tal y como es al natural, «To Live Again» nos derrite el corazón en las letras de un canto hacia la juventud perdida. Algunas lágrimas saltan de los recuerdos, porque el pasado no siempre es malo, hecho que Sebastian enseña cual ave fénix resurgida de sus cenizas. Tras diez años de relativo silencio, la icónica voz de Sebastian Bach vuelve a las andadas con un álbum sentimental que marca otro hito en la historia del reputado artista. Vuestro redactor y crítico Wesker le adjudica una añorada nota de 8,9. Pedirle a Sebastian que envejezca es motivo de condena perpetua, ¡y nadie quiere que suceda tal desgracia!
TrackList
1 – Everybody Bleeds
2 – Freedom
3 – (Hold On) To The Dream
4 – What Do I Got To Lose
5 – Hard Darkness
6 – Future Of Youth
7 – Vendetta
8 – F. U.
9 – Crucify Me
10 – About To Break
11 – To Live Again