ENFORCED y el belicismo de “War Remains”
Banda: Enforced
Nación: Estados Unidos (EEUU)
Género: Thrash Metal/Crossover
Álbum: War Remains
Año: 2023
Los clásicos siempre vuelven, de una forma u otra. ¿Os acordáis de esas locuras que se vivían en la década de los ochenta con moshpits y peleas entre el público? Pues si nos vamos a los tiempos modernos, el thrash/crossover americano encontró otra salida con Enforced, un quinteto cuyo brutal estilo de composición y sonido en estudio dejó a más de una discográfica bien sorda. Siendo Century Media el sello actual, la banda nos deleita con su tercer álbum, «War Remains», que llama a todos los thrashers a liarla parda como antaño.
Sin pensar demasiado y con ganas de dar tralla al máximo, «Aggressive Menace» abre el álbum con una estructura puramente old school y un sonido tan bestial que pocas cabezas aguantarían a primeras. Corto, pesado y muy crudo, Enforced nos demuestra una evolución más potente de su sonoridad, llevando los ritmos y solos a un extremo bastante inaudito. La voz de Knox resulta una motosierra que corta cualquier espacio vital, pues si nos centramos en «The Quickening», la alternancia entre ritmos rápidos y lentos propios del crossover se combina muy bien con la rabia vocal expresada. Los breaks típicos entre versos y estribillos conforman una sintonía indeterminada que es muy difícil de imitar, pues la batería de Alex se hace patente como la directora de cada tema, siendo evidente en «Hanged by my Hand». Directos hacia un moshpit continuo, «Avarice» continúa la presencia de riffs veloces, cierta tecnicidad y ante todo, un bajo sutil pero que cumple su función sin dar tregua. La forma en que sobresale de las rupturas rítmicas resulta casi sensual al oído.
Como tema homónimo del disco, «War Remains» saca el lado más thrasher de Enforced, levantando pasiones en las ondas mecánicas y destrozando los altavoces y amplificadores con un simple rasgueo o golpe instrumental. A la inversa, la cualidad crossover se denota en «Mercy Killing Fields», donde la voz de Knox se vuelve algo más gutural y furiosa, quedando acorde a la forma de ejecutar los ritmos de los versos y con un solo más afilado que una navaja albaceteña. Como si fuera una radio emitiendo en directo, las guitarras se recrudecen en «Nation of Fear», lo cual se entiende ante la corrupción informativa actual. El corte más lento, relativamente hablando, pero que hace gala a todo lo analizado antes mediante una habilidad interpretativa exquisita. Casi al final del álbum y queriendo reventar, aún más si cabe, el estudio de grabación, «Ultra-Violence» compensa su corta duración con una bestialidad sonora que, sobre el escenario, recordaría a bandas como D.R.I. o el más puro punk/thrash.
A base de acordes deslizados en los riffs principales, «Starve» deja un rastro enigmático que no tarda en convertirse en rapidez, tempos altos y una batería desbocada en su totalidad. El estilo oscuro se continúa en la terminación, aunque «Empire» esconde una joya thrasher que nada envidia al resto. Mediante un profundo sentido extremo, Enforced enlaza todo el disco en un frenesí de thrashería que no tardará en reventar al público que lo escuche. Sin duda, el quinteto americano ha conseguido evolucionar su estilo sonoro y el resultado sobrepasa la calidad musical que llevaban en su palmarés. Vuestro redactor y crítico Wesker le adjudica una libertaria nota de 8,7. Antes de que la banda salga en directo, sería mejor tener una ambulancia cerca, por si acaso los moshpits se vuelven demasiado salvajes.
TrackList
1 – Aggressive Menace
2 – The Quickening
3 – Hanged by my Hand
4 – Avarice
5 – War Remains
6 – Mercy Killing Fields
7 – Nation of Fear
8 – Ultra-Violence
9 – Starve
10 – Empire