Crónica: El XVII Atalaya Rock triunfa en todo el ámbito nacional

Desde hace décadas, las tierras castellano-leonesas han demostrado ser un punto álgido dentro de la escena rockera y metalera. Sea en Salamanca, Valladolid o Burgos, la génesis de bandas y festivales se hace patente conforme el tiempo transcurre en su contra. Siguiendo la tradición vallisoletana del nuevo siglo, el aclamado Atalaya Rock vuelve a celebrarse a mitad de octubre con su XVII edición. Mediante una fuerte apuesta por la música nacional, cinco bandas de diversos estilos se dan cita en la ciudad de Pozal de Gallinas, junto a la emblemática Medina del Campo. Siendo la entrada gratuita, el polideportivo del pueblo vuelve a acoger el mejor metal actual y clásico en una velada que será inolvidable.

GRAVE NOISE

A tiempo y con ganas de darlo todo sobre el escenario, los sorianos GRAVE NOISE fueron los encargados de abrir el festival en el atardecer tardío. Thrashers como sólo ellos saben, demostraron que su provincia tiene mucho que ofrecer a la escena metalera. Sin embargo, algo les falló durante toda la actuación, aunque fuese de forma algo puntual. La puesta en escena era brutal, el carisma de los artistas, fuera de sí… Pero el sonido resultó ser un vaivén de altibajos que dejó la presencia instrumental a cargo de los primos Sanz. El bajo de Toñín, reciente incorporación, pasó desapercibido, y eso que tenía sus zonas solistas, las cuales sólo se apreciaban desde la perspectiva local de su posición. No obstante, castigar a la banda sería una falta de respeto si no tenemos en cuenta que su último álbum, Roots of Damnation, les encumbró en el thrash metal underground y les valió el fichaje por Art Gates Records. A modo de presentación del mismo, el dúo Sanz se desenvolvió en unos ritmos veloces que dieron lugar a los primeros moshpits del evento. También hubo sitio para algunos cortes del disco debut, pero estaba claro que con poco tiempo de actuación, lo importante era dar tralla al máximo; ¡y bien lo consiguieron contra la adversidad técnica! Muy pronto volveremos a verlos, de modo que la sensación thrasher será aún mayor.

DIABULUS IN MUSICA

Veían de triunfar en Madrid, después en el Granito Rock… Ahora, les tocaba actuar algo más cerca de casa. Quizás por eso, Zuberoa salió al escenario con el mejor atuendo de gala con brillantes que existiese en su vestidor. Podría ser una reseña muy corta; ¡no será así! DIABULUS IN MUSICA siguió con la presentación de su último álbum, Euphonic Entropy, de la forma más directa, sinfónica y elegante que sólo los navarros pueden realizar, sin dejar de lado su extensa discografía. Repitiendo el decorado de las anteriores ocasiones, hay que reconocer que aun siendo los mismos intérpretes, su carisma y habilidad artística la adaptan al público presente. Entre la impresionante voz de Zuberoa y el constante ánimo ilusionante de Gorka, las notas del teclado se entrelazaban a las cuerdas vocales de la mano. Seré sincero al decir que, entre Madrid y Valladolid, me gustó más el show en la capital nacional, pero sólo por el aspecto íntimo. Siempre es de bien actuar ante un público mayoritario, pero se echa de menos la cercanía social en entornos algo más pequeños. Aun así, la guitarra de Aimar sonó de una forma espectacular, incluyendo el talento musical del mismo. A su vez, las delicias percusionistas de Ion se combinaban muy bien con los potentes graves de David, cuyo semblante serio imponía más que el servicio militar. Sin cambiar el repertorio, el sonido los acompañó todo el rato en un ambiente agradable, tanto que el público disfrutó como si no hubiera un mañana, aplaudiendo y ovacionando al quinteto de múltiples formas que significaron otro triunfo más para el symphonic metal español.

Setlist

One Step Higher

Ex Nihilo

In Quest of Sense

Hidden Reality

Inner Force

The Mistfit’s Swing

Invisible

Otoi

Shadow of the Throne

Sceneries of Hope

Lies in our Eyes

From the Embers

Earthly Illusions

DELALMA

Hay bandas cuyo término genérico les viene pequeño debido a las masas que mueven y el apoyo que reciben de forma continua. Considerados como una revelación musical desde su formación, DELALMA no tenía intención de cesar su racha de éxitos en directo. Con las primeras filas abarrotadas de gente que no quitaba los ojos del decorado al más puro estilo de una calle del siglo pasado, el ansiado espectáculo no se hizo esperar. Liderados por la incombustible voz de Ramón Lage, Acto de Fe y Renegar de Ti se consagraron como los primeros himnos en ser cantados al unísono. No era para menos, pues la ocasión merecía la necesaria colaboración de los asistentes, ¡y así fue de principio a fin! ¿Qué decir de Seoane y Ramil? Estrellas reputadas en sus instrumentos y compositores de la mejor calidad creativa. En halagos hacia el primero, sus solos parecían un juego de niños que cualquier podría emular… Si se tuviera la constancia y dedicación que sólo Seoane posee. Por parte de Ramil, toda la experiencia que cosechó en bandas anteriores la vertió en DELALMA con un toque de inspiración propia que hace atractiva cualquier canción donde participe. No olvidamos a Jesús y Dave, porque sin bajo ni percusión, temas como Ritual o El Mirlo no serían tan emotivas a la escucha. Envueltos en un ambiente sonoro y nivelado, la banda dejó que el público corease Cárcel de Cristal, el corte final de un concierto que no defraudó a nadie, fuera de carne y hueso o etéreo.

Setlist

Acto de Fe

Renegar de Ti

Mañana Vuelve a Oscurecer

Y Aun Siento Estar Allí

Ritual

Wicked Game (CHRIS ISAAK Cover)

El Mirlo

Luz ni Tiempo

Cárcel de Cristal

TIERRA SANTA

Todavía hay ignorantes que dicen que La Rioja es una comunidad pequeña e insignificante en el panorama nacional. Podrá serlo o no, pero la conjunción de un sustantivo y un adjetivo evidencian la historia legendaria riojana: TIERRA SANTA. Era el momento de vivir la leyenda musical del país de la mano de una de las bandas más míticas y reputadas del cambio de milenio. Con un nuevo álbum bajo el brazo que continúa la fértil tradición compositora del quinteto, el festival fue testigo de cómo las leyendas bajan del olimpo metalero y siguen forjando el futuro del heavy metal nacional, así como recodando el emotivo pasado y mostrando el digno presente. Todavía recuerdo estar en el taller de mi padre, y mientras él trabajaba, sonar de fondo himnos como Legendario, Séptima Estrella, Pegaso… Él decía que, después de clásicos como BARÓN ROJO, MURO y OBÚS, TIERRA SANTA era lo mejor que habría en el panorama nacional del nuevo milenio. Jubilado, tiene todos los discos de la banda junto a una maqueta del Mercedes-Benz 300 SL “Alas de Gaviota”. Sí, Destino también lo compró en Granada este verano y para él, de lo mejorcito que ha salido de la pandemia. Sin embargo, el setlist no se centró en presentarlo, sino que hubo una adecuada selección de los mejores temas de la discografía, como fueron Otelo, Drácula o la Leyenda del Holandés Errante, la cual provocó lágrimas de emoción en los coros al unísono.

Si es por artistas, los eternos Ángel y Roberto mantienen el estandarte musical con fuerza, pues verlos tan en forma es mérito de la medalla al valor y la constancia. A su lado, Dan se consolida como un guitarrista hecho a medida de su gran habilidad y carisma. Por detrás, la incorporación de Francisco a la batería planteó un cambio de rumbo que ha resultado acorde a las expectativas de sus antecesores. Finalmente, la ambientación de Juan Antonio es tan impecable como una sucesión de notas nítidas y que endulzan los temas para un mayor deleite auditivo. Tener un teclado en Sangre de Reyes o Alas de Fuego es un ángel de la guarda dando su bendición, al igual que la Canción del Pirata, el cierre más poético y admirable que hasta el propio Espronceda estaría orgulloso de ver su obra plasmada en un himno nacional que despidió a los riojanos entre llantos de ilusión y nostalgia.

Setlist

Pecado de Ángel

Indomable

Por el Valle de las Sombras

Sangre de Reyes

Apocalipsis

Otelo

Tierras de Leyenda

El Dorado

Destino

Drácula

Nerón

La Leyenda del Holandés Errante

Pegaso

El Laberinto del Minotauro

Alas de Fuego

La Sombra de la Bestia

Legendario

La Canción del Pirata (I & II)

BLOODHUNTER

El ambiente del recinto estaba tan caldeado que por algún sitio tenía que explotar. Aunque parte del público se empezaba a ir por cuestiones de tiempo, los más devotos se quedaron para que una bestia cerrase el Atalaya Rock por todo lo alto; ¡como debe ser! Desde Galicia y dispuestos a reventar todo lo que se les pusiese por delante, BLOODHUNTER sacó su arsenal a toda pastilla de brutalidad, guturales y una actitud impasible. Con nuestra querida Diva Satánica al frente, el público se dejó la mente en observar y comprender cómo una mujer podía rugir más que un león. Entre sanitarios, diré que el secreto no se esconde en su estructura laríngea o sus entrenado diafragma, sino en la capacidad de moldear, a baja frecuencia, las ondas mecánicas a la voluntad más metalera que una persona puede realizar. Para seguir presentado su aclamado tercer álbum, Knowledge Was the Price, así como cortes de lo anteriores trabajos musicales, la banda no escatimó en exprimir los recursos disponibles hasta los topes, llegando incluso a petar algunos equipos de sonido que no tardaron en recuperarse. La relativa tragedia tenía que suceder, porque razones había para ello. El dúo guitarrero de Dani y Guillermo, quienes mantenían nivelada la ecualización a cada lado, aparte de mover cabezas entre ritmos frenéticos. El bajo de Fabian, cuya pulida técnica sólo podía ser soportada por las más férreas cuerdas y el continuo redoble de bombos y platillos de Adrián, los mejores soportes que uno puede tener en la retaguardia. Al final, extraño fue que no saltasen las alarmas de incendio, porque Diva y el resto se llevaron el clamor y apoyo de una algarabía cuyas manos ardían de tanto aplaudir.

Setlist

A Twist of Fate to Come

Let the Storm Come

Still Stand Up

Spreading Your Disease

Medea’s Guidance

Nothing Beyond the Realms of Death

Never Let It Rest

All These Souls Shall Serve… Forever!

Knowledge Was the Price

The Eye of the Serpent

Embrace the Dark Light

Bring Me Horror